MEMORIA DEL PROYECTO:

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​​​Estamos convencidos de que los espacios siempre nos hablan, indicándonos cómo deben ser trabajados. Así fue como este piso nos transmitió la esencia del proyecto. Inicialmente, la idea era más simple y práctica, pero al descubrir la historia que guardaba el inmueble, nuestra estrategia de diseño cambió por completo.

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Bajo el laminado de madera que cubría el suelo, y que había permanecido oculto durante décadas, encontramos las baldosas hidráulicas originales, tan características de Valencia. Luego, al retirar dos falsos techos, descubrimos un espacio con diferentes alturas: una buhardilla oculta y un forjado de bovedillas catalanas, elementos que aportaron carácter y singularidad al lugar. Este hallazgo nos llevó a replantear nuestra intervención, optando por conservar la esencia del espacio.

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Estos descubrimientos, que habían permanecido ocultos durante años, fueron los que realmente definieron el rumbo del proyecto. En lugar de imponer una visión predefinida, decidimos respetar la historia del lugar y dejar que los elementos originales guiaran nuestras decisiones de diseño. 

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Por elección del propietario, decidimos conservar las habitaciones en el mismo lugar, de cara a la fachada principal, donde se encuentra el techo más alto de la vivienda. Propusimos hacer una conexión directa entre el salón y la habitación principal, separada únicamente por cortinas, para que la doble altura pudiera ser vista desde toda la casa. Luego, movimos la cocina del espacio cerrado donde se encontraba, para integrarla como parte del área abierta. El baño, por su parte, se ubicó en la antigua habitación donde estaba la cocina. De esta forma, liberamos el espacio, logrando un ambiente más diáfano y flexible.